Yellowbeard (Barba Amarilla) es condenado a veinte años de prisión por evasión de impuestos, sin que las autoridades británicas que confesara donde guarda su tesoro. Ante esta adversidad, la Royal Navy diseña un plan para apoderarse de las riquezas de Yellowbeard. Por lo tanto, se incrementó su sentencia a 140 años por una parte, para estimular su deseo de escapar y, en segundo lugar, facilita su vuelo, por lo que puede seguir a donde se esconde su fortuna y se lo quite. Una vez libre, Yellowbeard recluta una tripulación heterogénea y va en busca del mapa del tesoro, se escondió en la chimenea en el bar de su esposa. Sin embargo, explica que ha quemado el mapa, pero su hijo tiene una copia tatuado en la cabeza. Este es un revés, ya que su madre no está dispuesto a cooperar.